Lujo

La curiosa historia de cómo un genio susurró el nombre de Rolex

¿Te has preguntado qué significa Rolex? Esta es la historia de cómo un genio nombró a la famosa marca de relojes.

RSVP Staff

Publicado el:

Rolex es tal vez la marca más famosa en cuanto a relojes de lujo se trata, pero sabías que su nombre no tiene nada que ver con este accesorio sino con un genio que le dio la idea a uno de los fundadores de la marca.

En un inicio, Hans Wildsdorf y Alfred Davis eran un par de joyeros que comenzaron a ganar popularidad en la hechura de relojes a principios de 1900 en Londres, Inglaterra. Pero aún no estaban firmados por Rolex, sino por la compañía Wilsdorf and Davis.

[Foto: Rolex]

Te puede interesar: La historia de por qué Zara le debe su nombre a un bar 

Los socios fueron de los primeros en fabricar relojes de muñeca y para hacerlos más novedosos, incluyeron un mecanismo de precisión fabircado en Suiza. Fue entonces cuando relanzaron su empresa pero con un nuevo nombre.  

Según el sitio oficial de Rolex, Hans quería que el nombre fuera fácil de pronunciar en cualquier idioma y tuviera letras simétricas para que se viera elegante. Con esto en mente, hizo cientos de pruebas con diferentes combinaciones de letras del alfabeto, pero ninguno le convenció. Fue ahí donde entró el genio que le dio la idea.

Una mañana, mientras viajaba en la cubierta superior de tranvía tirado por caballos en la calle Cheapside de Londres, un genio susurró ‘Rolex’ en mi oído”, dijo Wilsdorf cuando cambió el nombre de su compañía en 1908 según el sitio oficial.

[Foto: Rolex]

Te puede interesar: El mensaje secreto que no habías notado en las bolsas de Forever 21 

Si bien esa es la historia oficial, hay quienes apuntan que en realidad Hans buscaba una onomatopeya que hiciera referencia al sonido de los relojes y Rolex le pareció la más indicada. Otros aseguran que es una abreviación de “excelencia relojera”, pero tampoco hay pruebas de eso.

En pocas palabras, oficialmente Rolex no tiene un significado y fue un nombre escogido por un genio mágico.

[Foto: Pexels]

Fue así como se quedó el nombre de la empresa británica que tuvo que mudarse a Ginebra, Suiza luego de la Primera Guerra Mundial para evitar pagar tantos impuestos y ciudad de la que no se ha ido.